¡Hay Esperanza!
¿Has visto la película que se titula: "El cuaderno de Sara"?
Mi familia y yo tratamos de ir al cine al menos una vez al mes. La última película que tuvimos el placer de ver fue esta; te cuento que impresión me dio:
Tengo que confesar que huyo un poquito del cine español, no porque sea malo, sino por escenas y actitudes íntimas que a mí personalmente no me gustan. Para mi sorpresa, esta película carece por completo de dichas escenas.
La historia se desarrolla en un lugar del mundo donde la vida no vale nada. Un lugar, donde los niños son arrancados de sus hogares para ser alistados como soldados, y hacer de ellos verdaderas máquinas de matar; un lugar, donde las niñas y mujeres son violadas hasta la muerte; un lugar, del que nadie quiere hablar porque daña gravemente la sensibilidad. Un lugar, que aunque queramos ignorar... existe, es real.
Laura, llega a África en busca de su hermana desaparecida un par de años atrás. Sara ha sido fotografiada por unos reporteros que se encontraban rodando un reportaje sobre las minas de coltán. El coltán es ese metal tan preciado que se encuentra en nuestros teléfonos móviles. La zona de las minas es un punto caliente que las guerrillas paramilitares se disputan; someten a adultos e incluso a los niños a extremas condiciones de esclavitud, mientras negocian con el mundo occidental que hacen la vista gorda a la cruda realidad.
En su viaje a través del corazón de África, Laura primero clama a la ayuda de un buscavidas colombiano y de un antiguo novio de su hermana Sara. Después que el viaje se tuerce, recurre a la ayuda de Jamir un muchacho que lleva a Laura al límite de sus fuerzas, y al mismo tiempo la protege con su propia vida.
Esta película en sí, es una clara denuncia del auténtico horror e infierno que esta gente está viviendo.
Parece obvio que en África no hay nada que se pueda cambiar, el alma se me cae al suelo...
Un colaborador de la ONG "Puertas Abiertas" www.puertasabiertas.org que visitó un país en guerra (no muy distinto a este país de África) hizo cierta declaración:
¡Hay Esperanza! Si... ¡Hay Esperanza!
Esperanza en el Único que entregó su vida; que tomó el lugar que nos correspondía a nosotros como pecadores. Esperanza en el Único que derramó hasta la última gota de su sangre.
¡Esperanza en Jesucristo!
"Pero los que confían en el Señor
renovarán sus fuerzas;
volarán como las águilas:
correrán y no se fatigarán,
caminarán y no se cansarán."
(Isaías 40:31)
María Soraya
