¡LLegó la primavera!
Recicla, cuida, ama tu planeta
Con la primavera llegaron las ganas de hacer deporte al aire libre, o simplemente, pasear placenteramente por los campos verdes y un sin fin de colores típicos de una estación como esta.
Sin embargo, en medio de este paisaje variopinto y fluido algo rompe esa armonía brutalmente...
Basura arrojada sin ninguna discriminación al suelo de nuestros campos, provocando así, una alteración de las condiciones de supervivencia de la flora y la fauna, que con el tiempo producirán un impacto contaminante y nocivo para el ser humano.
Es muy triste ver basura tirada por doquier, colchones viejos abandonados, escombros, botellas de plástico, de cristal, latas de refrescos, bolsas que el viento lleva de un lugar a otro.
Empobrece, contamina, además de ser un verdadero peligro en el caso del cristal para futuros incendios.
Hemos de concienciarnos, tenemos que mantener nuestros campos limpios. Debemos conservar nuestro entorno limpio de todo aquello que pueda ser un peligro futuro para la tierra.
La basura tiene su lugar privilegiado, aportemos cada uno con nuestro granito de arena y cuidemos del planeta.
Yo, tengo que reconocer que reciclar como modo de ayuda a mantener la basura cada una en su lugar, me costó.
Recuerdo, que invité a comer en mi casa a una amiga (era semana santa).
Se sorprendió muchísimo cuando vió que no reciclaba, sino que lo mezclaba todo, hecho que yo misma justificaba declarando que crearan más puestos de trabajo en la planta de division de basuras.
Sin embargo, dijo algo que me avergonzó bastante: ¿cómo tú siendo creyente no cuidas del planeta que Dios nos entregó a los hombres?
Como dicen ahora ¡ZASCA!
Es entonces, que decidí reciclar y aportar ese granito de arena para cuidar de nuestra tierra indiferentemente que haya más o menos personal para dicha tarea.
Sí, sé que estás pensando ¡no tengo sitio! ¡no tengo tiempo! ¡no tengo...!
Medítalo; un pequeño esfuerzo como este se notará a largo plazo, pensemos en nuestros hijos y nietos que son los que heredarán todo ello.
"Así que Dios creó a los seres humanos a su propia imagen. A imagen de Dios los creó;
hombre y mujer los creó.
Luego Dios los bendijo con las siguientes palabras: «Sean fructíferos y multiplíquense. Llenen la tierra y gobiernen sobre ella. Reinen sobre los peces del mar, las aves del cielo y todos los animales que corren por el suelo»."
(Génesis capítulo 1, versículos 27 y 28)
Queridos amigos y lectores gracias por estar ahí. Recuerda compartir si te ha gustado.
¡Feliz primavera! y chaoooo
María Soraya
